¿POR QUE NO SE CUMPLEN TUS SUEÑOS?

Es imposible ocultar mi asombro por el promedio -que cada vez aumenta- de las personas que creen que cumplir los sueños hoy día es algo irreal o solo para unos pocos; a esto agrégale la subcultura que ha venido cobrando fuerza desde las sombras y que no por ser minoría es irrelevante. Hablo de ese grupo que ha venido chocando mentes e influenciado en estilos de vida y corazones por más de cinco décadas.

De manera paradójica el movimiento que empezó en los 60, esa consigna del “aquí y ahora”, el amor liberal y vivir de manera desprendida es lo que hoy ha atado a mas personas en un pasado tormentoso por malas decisiones y con la menor posibilidad de pensar o crear futuro.

Déjame explicarlo mejor; en una forma sutil existe un sistema que impulsa a personas precisamente a no soñar o proyectarse. ¿Por qué? Porque si hay un bombardeo constante por todos los medios de solo “vivir el hoy” ¿Para que crear futuro? O trazarte metas. Si te dan todas las herramientas para estar en un amor liberal ¿Por qué casarte? O pensar en hijos de manera responsable…en fin… si no tienes el espacio de mirar futuro tampoco te interesas en soñar con el.

Es una realidad dura que deja al descubierto lo mal y degenerado que estamos los seres humanos pero también la necesidad ENORME que tenemos de Dios.

Ahora, ¿Por qué no se cumplen tus sueños? Con todo esto en mente, la primera razón por la que quizás tus sueños no se cumplan sea por:

1. CONCEPTOS ERRADOS: Sacar el chip que ha estado por más de cincuenta años afectando la manera de pensar, requiere resetearnos y saturarnos en la palabra de Dios.

Requiere reinventar conceptos en la mente. Si el concepto que tienes sobre libertad afecta tu bienestar y mata tu futuro, no es precisamente libertad genuina a lo que tu concepto apunte.

Ejemplo, el trasfondo detrás de fumar a diario, de tener relaciones sexuales fuera del matrimonio, de mentir u otra no es precisamente “libertad”, puede que se trate de cualquier otra cosa (falta de control propio o baja estima) pero no libertad. No hay libertad en un cáncer de pulmón, ni en una dependencia emocional y mucho menos en una vida llena de ansiedad. Bien, ¿Cuáles son tus conceptos sobre sueños y metas?

2. INCONSTANCIA:

Me causa gracia nuestro cinismo de hacer reclamos a Dios de no cumplir sueños por los cuales ni siquiera nosotros trabajamos. Que lo obliguemos a mantener viva y encendida metas que en nuestro corazón ya murieron hace tiempo, y creo que aquí hace falta coherencia y constancia. Si realmente queremos algo y estamos convencidos de que un llamado proviene de Dios apasionémonos por ello y trabajemos hasta alcanzarlo.

He descubierto que la mejor manera de matar la inconstancia en mi vida es siguiendo el consejo de Dios en Habacuc

“Y luego Dios respondió: Escribe esto, escribe lo que ves, escríbelo en grandes letras mayúsculas para que pueda leerse en la carrera.”

Habacuc 2:2

Escribe, escribe, escribe…

Escribo todo lo que Dios me ha prometido, mis sueños y lo que quiero a futuro para que mientras corro la carrera de la vida esto me sirva de recordatorio y de alerta hacia donde voy siempre.

3. IMPACIENCIA:

Mucho antes de que se discutieran leyes sobre el aborto “físico” ya existían leyes en algunos corazones sobre este tema. No son nuevas, estas leyes son solo una manifestación externa de lo que ya en el corazón estaba siendo aprobado.

La verdad es que esperar por nueve meses o más desde que se concibe un sueño hasta que se cumple nos impacienta hasta abortarlo. Quisiéramos tener un microondas para todo en la vida, marcar y controlar el tiempo de cada meta, sin embargo, eso solo demuestra lo obsesionado que estamos por tener el control de todo, ignorando que hay cosas de las que solo Dios tiene el control absoluto.

En este sentido, para calmar mi ansiedad, me ha funcionado el casarme con mis sueños y anhelos. Me comprometo con ellos en la salud y en la enfermedad, riqueza y pobreza. Mantengo en mente la paciencia, cuidado y trabajo que ellos necesitan y a su vez aprendo el arte de esperar en la presencia de Dios, convencida de que todo en su tiempo es extremadamente perfecto.

4. DEMASIADO INTERÉS POR EL RESULTADO:

En alguno de los libros que he leído de Chopra, el afirma, “Mientras más interés por el resultado menos probabilidades hay de que suceda”. La verdad no lo había entendido en su totalidad hasta hace poco que Dios decidió hablar del asunto conmigo y decirme, “Si quieres más, aprende a soltar”

Ahora, alguno pudiera leer estas dos oraciones y decir que es algo ilógico y argumentar ¿Para que soñar entonces?, pero esto no tiene que ver con renunciar a deseos y anhelos, sino que se refiere a renunciar al interés por el resultado de esos deseos y anhelos, se refiere a presentar los planes delante de Dios con una actitud libre de egoísmo y capricho.

A veces nos enfrascamos tanto en una sola posibilidad -NUESTRA posibilidad- que entramos en una constante negación hacia Dios, no nos atrevemos siquiera hablar de nosotros con El porque creemos erradamente que nos espera con un gran NO. Lo grave y peligroso de cegarnos en esta escala es la manera en como aumenta nuestra autosuficiencia y resentimiento hacia Dios, cuando en realidad somos nosotros mismos los que nos limitamos a una sola ventana.

“Padre mío, si hay alguna forma, sácame de esto. Pero por favor, no es lo que quiero. Tú, ¿qué quieres?"

Mateo 26:39

Quiero atreverme a decir que Dios nos ama tan profundo y amplio que suprime nuestros deseos egoístas y lo que El quiere por hacer lo que es mejor para todos –sus hijos-. Al igual que Cristo en el versículo anterior, renunciar al interés por el resultado abre un abanico de posibilidades y escenarios muchísimo mejores de lo que pudiéramos incluso pensar o imaginar en nuestros sueños más locos, para así exclamar: ¡Gracias Padre!